Primero hay que diferenciar las mordeduras de los perros: algunas son suaves e inofensivas, cuando están jugando y las fuertes, peligrosas e agresivas cuando los canes usan los dientes y son capaces de hacer daño o causar heridas a las personas u otros animales.
A excepción de que exista un problema de agresividad permanente en el perro, en muchas ocasiones suele haber algún motivo previo que ha llevado al perro a morder en un momento específico.
Tal como sucede con los seres humanos, los perros sienten, y no nacen sabiendo. En la mayoría de las ocasiones que muerden no son muy conscientes de lo que están haciendo. La mordedura es un auto-reflejo o no lo consideran como algo grave.
Entre las causas por las que muerden los perros están: