Las cáscaras de naranja siempre terminan en la basura, salvo que te guste usarlas en el mate como aromatizante y endulzante natural. Esta parte de la fruta concentra un maravilloso aceite, el cual puede perfumar toda la casa.
Las cáscaras de naranja siempre terminan en la basura, salvo que te guste usarlas en el mate como aromatizante y endulzante natural. Esta parte de la fruta concentra un maravilloso aceite, el cual puede perfumar toda la casa.
Sin embargo, y aunque no lo creas, la cáscara de la naranja puede reciclarse de muchas maneras y además de ser un elemento decorativo, también puede llenar tu casa con un delicioso aroma.
Materiales
Una de las formas más hermosas para reciclar las cáscaras de la naranja es convertirlas en velas. Solo tienes que cortar una naranja por la mitad y retirar toda la pulpa.
Tienes que dejar la cáscara lo más limpia posible. Espera a que la misma se seque por completo y luego podrás rellenarla con una vela. Si lo deseas, cuando realices la preparación de la vela, puedes agregar colorante y aromatizante naranja.
Coloca el pabilo en la mitad de la naranja, suma la vela y espera a que la misma seque. Si lo deseas, puedes agregar un poco de clavo de olor o de canela como decoración.
Materiales
Esta segunda opción consiste en realizar una guirnalda con la cáscara de la naranja y con algunas rodajas secas de esta fruta. Puedes ayudarte con el hilo y una aguja para que las rodajas y la cáscara vaya quedando ordenada, y si lo deseas puedes sumar unas mostacillas de madera o de algún color en específico a modo de adorno.
También puedes sumar hojas o ramas de diversos árboles, piñas, ramas de canela, anís estrellado, etc. La idea es que la guirnalda quede colorida, pero que al mismo tiempo sea aromática y perfume todos tus ambientes.