¡No lo sabía!

Qué significan las manchas amarillas en la almohada y cómo quitarlas correctamente

Es normal que con el uso y el tiempo las almohadas se formen manchas amarillas en ellas. Aunque es usual, muchas personas desconocen qué significa y como dejarlas como nueva

Uno de los complementos más importantes para favorecer el correcto descanso durante las noches es la almohada. Con el tiempo y uso en estas aparecen manchas de color amarillo. Aunque es usual, muchos desconocen qué significan

Cabe mencionar que estas manchas aparecen en cualquier tipo de almohada, sea cual sea el material del cual estén hechas, relleno y tamaño. Te contamos que significan y el truco para dejarlas como nuevas.

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Qué significan las manchas amarillas en la almohada

La causa más común de esta manchas en la almohada es por sudor. Todos sudamos por las noches mientras dormimos, para que tu cuerpo se mantenga a una temperatura confortable. El sudor se va filtrando por el tejido de la funda de la almohada hacia la almohada, impregnándose a ella. Es normal que esto pase, ya que la cara de una persona suele estar en contacto mínimo de unas 6 a 8 horas con la almohada.

Otra de las causas es irse a la cama con el cabello mojado, ya que la humedad hará que la almohada poco a poco se vaya despintando o se formen manchas amarillas. Así mismo la saliva también origina las manchas amarillas, es normal que con frecuencia las personas babean, ya que en algún momento de la noche duermen con la boca abierta.

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Por último, exponer las almohadas blancas ante la luz directa del sol durante períodos extensos puede también dejarlas amarillas. Evita poner a secar tu ropa de cama, incluso tus almohadas directo al sol y déjalas en un lugar aireado.

Como sacar manchas amarillas de la almohada 1.jpg

El truco para quitar la mancha amarilla de la almohada

Para dejar las almohadas como nueva se debe:

  • Retirar las fundas o protectores de las almohadas
  • Espolvorear con bicarbonato sódico sobre ambos lados y de forma paralela
  • Se prepara una solución mezclando partes iguales de agua y vinagre blanco en un pulverizador, que se rocía sobre el bicarbonato
  • Se deja que la mezcla actúe durante al menos media hora
  • Se utiliza un cepillo para tapicerías o un aspirador para retirar el bicarbonato y los restos de suciedad

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