Cuando llega la tarea de lavar los platos y es el turno de los vasos, se ve con mucha frecuencia qué para secarlos, se dejan boca abajo, sin saber realmente qué significa y lo perjudicial para la salud que puede llegar a ser esta modalidad.

Luego de limpiarlos con una esponja y detergente, los vasos son enjuagados y van a parar a un escurridor o, en el peor de los casos, a un repasador o rejilla boca abajo.

Los que más saben, indican que se está cometiendo un error garrafal, ya que no es la mejor manera de poner a secar los vasos, con consecuencias desagradables.

Así como hay que tener mucho cuidado en la cocina, como por ejemplo al manipular alimentos crudos, los vasos tienen que ser tratados de la misma manera, con todos los recaudos.

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Qué significa dejar los vasos dados vueltas luego de lavarlos

Podría explicarse brevemente de dos maneras qué significa poner boca abajo a secar los vasos, con la idea de que se escurran más fácilmente.

Primero que nada, no se trata de una superstición ni nada de eso, sino que una muy mala decisión, que debería ser corregida.

Y segundo, significa que seguramente es una acción contraproducente para la salud.

¿Por qué? Por estos claros motivos que hay que tener en cuenta y tomar nota:

  • Apoyar los vasos dados vuelta en un repasador o rejilla es malo, debido a que el aire queda encerrado y no circula.
  • Al no circular, se genera humedad que no puede salir y se generan bacterias.
  • Lo que hay que hacer, si se quiere colocar los vasos boca abajo para que escurran y se sequen más rápido, es apoyarlos en una superficie que no sea plana y tenga relieve.
  • Un escurridor o dejarlos boca arriba, es la mejor manera de ponerlos a secar.
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