Por eso el PAMI ayuda a sus afiliados a conocer los síntomas de un golpe de calor ya que es fundamental para identificarlo a tiempo y evitar complicaciones en la salud de los adultos mayores.
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PAMI: cómo prevenir un golpe de calor
Para prevenir un golpe de calor, hay que tener en cuenta los siguientes cuidado para proteger la salud:
- Hay que hidratarse constantemente: tomá agua regularmente, aunque no sientas sed. Evitá las bebidas alcohólicas o muy azucaradas.
- Vestirse con ropa adecuada: elegí prendas livianas, de colores claros y hechas con materiales frescos.
- Cuidarse del sol: buscá lugares frescos y sombreados, especialmente entre las 10 y las 16.
- Proteger la piel: usá protector solar con el factor adecuado y volvé a aplicarlo cada dos (2) horas.
- Hay que ventilar los ambientes: mantené los espacios frescos y ventilados. Si podés, usá ventiladores o aire acondicionado.
- Disminuir la actividad física: evitá realizar actividad física intensa cuando las temperaturas sean más altas.
PAMI: qué hacer ante la aparición de síntomas de un golpe de calor
En esta época del año, es muy importante que los adultos mayores ante un golpe de calor se hidraten inmediatamente, se debe buscar la sombra o un lugar fresco y humedecer la piel con agua fría. Si se presentan síntomas graves como fiebre alta (más de 39°C), confusión o desorientación con pérdida de conciencia se de acudir de inmediato al médico.
Los síntomas leves de un golpe de calor son:
- Piel caliente y enrojecida
- Dolor de cabeza
- Mareo
- Calambres musculares
- Sed intensa y sequedad en la boca
- Sudoración excesiva
- Agotamiento, cansancio o debilidad