Paso 1: Corta un limón por la mitad y exprímelo directamente sobre la mancha de óxido. Asegúrate de cubrir bien toda el área afectada.
Paso 2: Espolvorea una capa generosa de sal sobre el jugo de limón. La sal ayudará a frotar y levantar el óxido.
Paso 3: Deja que la mezcla actúe durante al menos 2 horas. En casos más difíciles, puede dejarse toda la noche.
Paso 4: Frota con un cepillo, una esponja o incluso con la cáscara del limón para potenciar el efecto.
Paso 5: Enjuaga con agua tibia y seca bien el objeto para evitar que la humedad genere nuevas manchas.
Mancha de óxido el truco casero para eliminarla (1).jpg
Este truco casero puede probarse en utensilios de cocina, herramientas de jardín, bicicletas e incluso en prendas de ropa con buenos resultados. Sin embargo, se recomienda hacer una pequeña prueba en una zona poco visible, especialmente en telas delicadas o superficies pintadas.
Una solución accesible que vuelve a los básicos de la limpieza natural
Cada vez más personas optan por métodos naturales y sostenibles en su día a día. Este truco con limón y sal no solo demuestra que lo casero puede ser efectivo, sino que también invita a redescubrir los usos de ingredientes cotidianos en el mantenimiento del hogar.