Jardinería

Ni petunias ni margaritas: la planta de flores delicadas que llena de vida el jardín

Es una planta de flores llamativas que requiere cuidados sencillos y es muy popular en los jardines y espacios exteriores

Si quieres convertir tu jardín en un oasis lleno de vida y color, deberías poner atención a las plantas que cultivas. Escoge especies que tengan flores llamativas y que sean de fácil cuidado. A continuación, te dejamos una opción ideal para disponer en espacios exteriores, unas flores que son similares a las petunias, pero son más delicadas.

La calibrachoa es una planta que muchas veces se confunde con las petunias, porque sus flores son parecidas, en forma de campana. Ambas son de la familia de las solanáceas, pero tienen diferente tamaño, crecimiento y mantenimiento. Si quieres decorar un rincón para darle un poco de vida, toma nota de los cuidados básicos de la calibrachoa.

Según un artículo de los expertos en jardinería de hogarmania.com esta planta de pequeño porte no suele superar los 20 centímetros, por lo que es ideal para cultivar en espacios reducidos. La calibrachoa tiene hábitos rastreros, por lo que se puede disponer en macetas colgantes, e incluso decora terrazas y balcones.

Cuidados básicos de la planta de flores delicadas

Es nativa de Brasil y otros países de Sudamérica, por lo que prefiere climas cálidos con inviernos suaves, que las temperaturas anuales oscilen entre los 15 y 28°C. Sin embargo, también se pueden adaptar a regiones con inviernos más fríos. Lo ideal es cultivar estas plantas en zonas del jardín donde reciban sol directo, a excepción de las regiones que tienen veranos muy calurosos, donde es mejor la semisombra.

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Las flores de esta planta pueden ser de color amarillo, rojo, blanco, violeta, naranja, azul o fucsia.

Las flores de esta planta pueden ser de color amarillo, rojo, blanco, violeta, naranja, azul o fucsia.

La calibrachoa, requiere un riego constante, pues necesita un suelo algo húmedo, evitando que este permanentemente mojado. Por otro lado, es importante que tenga un sustrato con buen drenaje, con un pH neutro o ligeramente ácido. Los expertos recomiendan fertilizar cada dos o tres semanas, durante la floración que ocurre en los meses de primavera y verano.

Generalmente la planta tiene tendencia natural a alargar sus tallos, por sus hábitos rastreros. Por esta razón, en algunos momentos puede parecer descuidada. Si quieres evitar esto puedes realizar podas de pinzado, recortando los tallos más largos, hasta igualar la mayoría de ellos. Siguiendo estos consejos, la calibrachoa crecerá y embellecerá el jardín con sus flores delicadas.

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