El pollo, un clásico infaltable en la cocina de todo el mundo, destaca por su versatilidad y su capacidad de adaptarse a una infinidad de recetas. En este sentido, un chef tiene un truco bajo la manga que puede transformar tu pollo en una experiencia culinaria inolvidable.
Con este truco, no solo lograrás un pollo jugoso y lleno de sabor, sino que también descubrirás un secreto que muchos chefs usan para llevar sus platillos al siguiente nivel. No importa si lo preparas a la parrilla, en el horno o en freidora de aire, este truco es clave. Sigue leyendo y descubre cómo convertir el pollo en la estrella indiscutible de tu mesa.
El eficaz truco para que el pollo asado quede más jugoso y con más sabor, según un chef profesional
En diversas recetas, el pollo se sazona en seco aplicando sal o se masajea con aceite o mantequilla. Estos trucos buscan realzar su sabor y textura, pero presentan limitaciones en términos de jugosidad y distribución uniforme del sazón. En este sentido, el chef Thomas Keller tiene la clave.
Keller es un chef estadounidense reconocido por su restaurante The French Laundry. En un vídeo de su cuenta de Instagram explica que para que el pollo asado quede jugoso y sabroso, se debe sumergir en una salmuera, una mezcla de agua y sal, a la que se pueden añadir hierbas o especias. Este truco ayuda a retener la humedad y a distribuir el sabor de manera uniforme en toda la carne.
Este truco tiene varias ventajas al aplicar la salmuera al pollo:
- Mayor jugosidad: la salmuera permite que el pollo retenga más humedad durante la cocción, ya que la sal rompe las proteínas y facilita la penetración del agua en la carne. Así, el pollo se mantiene jugoso, un truco esencial para lograrlo en comparación con otras técnicas.
- Sabor uniforme: gracias a la penetración del agua en la carne, el pollo se sazona de manera más homogénea, asegurando que el sabor llegue de manera uniforme en todas las partes del pollo, algo que muchos chefs valoran mucho.
- Variedad de sabores: Al añadir hierbas, especias y otros condimentos a la salmuera, estos se distribuyen por toda la carne del pollo, aportando una variedad de sabores en cada bocado. Este truco es una excelente forma de mejorar el sabor del pollo y hacerlo aún más sabroso.
Este sencillo truco de chef es uno de los favoritos para asegurar que el pollo quede siempre perfecto y jugoso.
Paso a paso de este truco
Para este truco basta con:
- En un recipiente grande, se mezcla el agua, la sal y el azúcar. Se remueve bien hasta que todo se disuelva completamente.
- Se coloca el pollo limpio en la salmuera, asegurándose de que quede bien cubierto. Si es necesario, se añade más agua fría con la misma proporción de sal (50 g por litro de agua). Luego, se tapa el recipiente y se refrigera entre 6 y 12 horas.
- Se retira el pollo de la salmuera, se enjuaga con agua fría para eliminar el exceso de sal y se seca completamente con papel absorbente, tanto por dentro como por fuera.
- Se coloca el pollo en una bandeja o rejilla para hornear y se asa durante 20 minutos en el horno precalentado.
- Se baja la temperatura del horno a 180 °C y se continúa cocinando el pollo durante otros 40-50 minutos, o hasta que la temperatura interna del pollo en la parte más gruesa del muslo alcance los 75 °C.
- Se deja reposar el pollo fuera del horno durante 10 minutos antes de trincharlo y servirlo.