- Sueños normales: aquellos en los que la persona no es consciente de que está soñando.
- Sueños lúcidos: en los que la persona sabe que está soñando e, incluso, puede controlar lo que sucede en el sueño.
Según Sans Segarra, los sueños en los que la persona siente que vuela pueden indicar:
- Fuerte conexión con la creatividad y la intuición.
- Deseo de liberarse de preocupaciones o situaciones que nos limitan en la vida real.
- Acceso a un estado de mayor consciencia o percepción de la realidad.
¿Por qué olvidamos lo que soñamos?
Una investigación realizada por expertos de la Escuela de Estudios Avanzados IMT de Lucca, en conjunto con la Universidad de Camerino, responde esta pregunta que muchos se han realizado al menos una vez.
Entre los años 2020 y 2024, más de 200 personas, con edades entre 18 y 70 años, participaron en el mencionado estudio en el que registraron sus sueños durante 15 días.
Los participantes utilizaron una grabadora de voz para indicar si habían soñado y, en caso afirmativo, si podían describirlo o si solo tenían la sensación de haber soñado sin recordar los detalles. Los resultados fueron sorprendentes:
- Las personas que presentan una actitud favorable hacia los sueños y mayor predisposición a la divagación mental tenían una probabilidad más alta de despertarse con recuerdos oníricos.
- Los que pasaban más tiempo en una fase de sueño ligero tendían a recordar mejor sus sueños.
- Las personas más jóvenes lograban recordar sus experiencias oníricas con mayor frecuencia, mientras que las personas mayores reportaban con más frecuencia la sensación de haber soñado sin poder precisar detalles, fenómeno conocido como “sueños blancos”.