Según el feng shui, puedes utilizar estos colores en elementos como el árbol de Navidad, las guirnaldas, los centros de mesa o incluso en la ropa que uses durante las fiestas. Para un resultado más equilibrado, puedes combinar estos tonos con otros colores más suaves como el blanco o el crema.
Para el feng shui, elegir los colores adecuados durante las celebraciones navideñas puede ser clave para comenzar el próximo año con la mejor vibración posible.
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Feng shui: los colores que atraerán la abundancia y la prosperidad en Navidad
El feng shui nos sugiere que durante la Navidad, dos colores en particular son clave para crear un ambiente armonioso y lleno de energía positiva.
- Rojo: el rojo es el color por excelencia de la Navidad. Simboliza la pasión, la energía y la vitalidad. Además, se asocia con la buena fortuna y la prosperidad. Incorporar el rojo en tu decoración navideña, ya sea en adornos, velas o textiles, activará la energía y creará un ambiente festivo y acogedor
- Dorado: el dorado es otro color que no puede faltar en la decoración navideña según el Feng Shui. Representa la riqueza, la abundancia y el éxito. El dorado aporta luminosidad y elegancia a cualquier espacio, creando una sensación de opulencia y celebración
Por otro lado, el feng shui advierte de otros colores que pueden generar desequilibrio y afectar negativamente el ambiente, por lo que desaconseja utilizarlos durante Navidad:
- Negro: este color está asociado con la oscuridad, la negatividad y la ausencia de energía. En el contexto de la Navidad, que es una celebración llena de luz y alegría, el negro puede generar un ambiente pesado y poco acogedor. Además, bloquea el flujo de energía positiva en el hogar
- Azul oscuro: aunque el azul es un color relajante, en su tonalidad más oscura puede generar una sensación de frío y tristeza. En Navidad, se busca crear un ambiente cálido y acogedor con algunos colores, por lo que el azul oscuro puede resultar poco apropiado