Todo comenzó en octubre de 2023, cuando la policía recibió una alerta sobre restos humanos en la superficie de una turbera en Bellaghy, Irlanda del Norte. El examen inicial mostró que el cuerpo tenía al menos 2,000 años de antigüedad, y un antropólogo forense sugirió que pertenecía a un varón de entre 13 y 17 años.
Los estudios posteriores realizados por los Museos Nacionales de Irlanda del Norte revelaron datos cruciales. La mujer de Ballymacombs More tenía entre 17 y 22 años cuando murió y medía aproximadamente 1,7 metros.
Las dataciones precisas ubicaron su existencia entre el 343 y el 1 a.C., durante la Edad de Hierro en Irlanda. Las marcas de corte en las vértebras de su cuello prueban que murió por decapitación, y junto al cuerpo recuperaron fragmentos de tejido que aportaron información adicional.
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La zona en la que se realizó el descubrimiento original, hace dos décadas.
Un descubrimiento importante
"La Mujer de Ballymacombs More es uno de los descubrimientos arqueológicos más importantes en la isla de Irlanda", afirmó Niamh Baker, curadora de arqueología de los Museos Nacionales de Irlanda del Norte. Su importancia aumenta porque la mayoría de los cuerpos de pantano de este período pertenecen a hombres.
Las investigaciones sobre cuerpos de pantano de la Edad de Hierro demostraron que estos sacrificios humanos probablemente se relacionaban con rituales de soberanía. En tiempos difíciles, los reyes ordenaban estas muertes violentas para asegurar la productividad de la tierra.
Según Ned Kelly, ex conservador de antigüedades del Museo Nacional de Irlanda, estas ofrendas posiblemente se realizaban en honor a la diosa celta de la tierra. Este contexto cultural ilustra las prácticas religiosas de las comunidades célticas que habitaron la región hace más de dos milenios.
La cabeza de esta joven nunca apareció, pero su cuerpo aún puede revelar más información valiosa. "Futuros análisis, incluido el estudio de ADN antiguo, arrojarán hallazgos adicionales", comentó Murphy, dejando abierta la puerta a nuevas revelaciones sobre este extraordinario caso.
La historia de las prácticas ceremoniales antiguas
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Durante años se desconoció la verdad sobre este descubrimiento.
Este hallazgo permite a los arqueólogos profundizar en las prácticas rituales de las sociedades célticas. Los sacrificios humanos en este contexto histórico reflejan creencias sobre la conexión entre los líderes, la tierra y sus deidades.
La historia de la Mujer de Ballymacombs More complementa otros hallazgos de cuerpos de pantano en Europa que proporcionaron datos valiosos sobre la vida en la Edad de Hierro. Estos restos, conservados por las condiciones únicas de las turberas, son fuentes directas de información sobre aspectos ceremoniales de nuestros antepasados.
El hecho de que este descubrimiento corresponda a una mujer abre nuevas líneas de investigación sobre el papel femenino en los rituales de sacrificio, un aspecto relativamente inexplorado debido a la predominancia de cuerpos masculinos en contextos arqueológicos similares.
