La especia que tenés en casa y que, según el Feng Shui, puede acabar con tus problemas de mala suerte (1).jpg
Hay varios rituales y formas de aplicar la sal según esta antigua práctica china. Uno de los más conocidos consiste en colocar pequeños recipientes de sal en distintos rincones del hogar, especialmente donde se sienta una carga densa o negativa. También se puede hacer una limpieza energética del hogar, esparciendo sal por las esquinas y luego retirándola.
Otra técnica recomendada es disolver sal gruesa en agua y pasarla con un paño por pisos y superficies. Esto, según el Feng Shui, ayuda a "resetear" la energía del lugar y acabar con los problemas que generan malestar o sensación de estancamiento.
Si te preguntas qué tipo de sal se debe usar, el Feng Shui recomienda especialmente la sal gruesa o marina, ya que su forma más natural conserva mejor sus propiedades energéticas. No obstante, si solo tienes sal de mesa, también puedes utilizarla con intención clara y consciente, que es lo más importante en esta práctica.
¿Cuándo hacer una limpieza con sal?
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No hay una fecha específica, pero se sugieren hacer limpiezas energéticas con sal cuando hay conflictos frecuentes en el hogar, sensación de "mala racha", fatiga sin causa aparente o después de una visita que haya dejado un ambiente cargado. También es común hacerlo al comenzar el mes, el año o tras mudarse a una nueva vivienda, para acabar con cualquier problema heredado del espacio.
El Feng Shui se presenta como una herramienta accesible para quienes buscan armonía en el hogar. Y la buena noticia es que no hace falta gastar una fortuna: una simple especia como la sal puede ser la clave para acabar con los problemas energéticos y abrir paso a una nueva etapa de equilibrio y buena suerte.