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La ciencia responde: ¿es bueno o malo hacer la cama durante la mañana?

Hacer o no hacer la cama en la mañana no tiene una respuesta absoluta, pero la ciencia te puede ayudar a orientar esta pregunta según tus necesidades

Cada mañana, el hábito de hacer la cama es un pequeño ritual que algunas personas consideran fundamental para empezar el día con orden y energía. Sin embargo, la ciencia ha abierto un debate sobre si esta práctica, aparentemente inofensiva, podría tener implicaciones para la salud.

Los pros de hacer la cama en la mañana

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Hacer la cama en cuanto uno se levanta puede traer beneficios psicológicos y emocionales. Realizar actividades rutinarias como limpiar y ordenar la cama ayuda a establecer una estructura mental positiva para el día.

Tener una cama arreglada genera un sentido de logro que puede mejorar el estado de ánimo y reducir el estrés, lo cual puede beneficiar la productividad y el bienestar emocional.

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Además, la organización personal, puede ser un catalizador para construir otros buenos hábitos. Charles Duhigg, autor de El poder de los hábitos, describe hacer la cama como un "hábito clave", que puede desencadenar otros comportamientos positivos y crear una sensación general de control y orden en la vida.

¿Y los contras? La ciencia de los ácaros

Sin embargo, no todo es positivo. Desde una perspectiva biológica, algunos expertos sugieren que hacer la cama de inmediato podría no ser la mejor opción para la salud.

Algunos estudios que respectan a estos temas han señalado que el ambiente húmedo y cálido de una cama recién utilizada es ideal para la proliferación de ácaros del polvo, microorganismos diminutos que pueden desencadenar problemas respiratorios, como asma y alergias.

¿Cuál es la mejor opción?

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Lo que recomienda la ciencia es que hacer la cama no es intrínsecamente malo, pero el momento puede ser clave. Si quieres hacer la cama y mantener una buena higiene, una solución podría ser ventilar la habitación y dejar las sábanas expuestas al aire durante al menos 20 a 30 minutos antes de arreglarla. De esta manera, se obtienen los beneficios de una cama organizada sin favorecer un ambiente propicio para los ácaros.

Hacer o no hacer la cama en la mañana no tiene una respuesta absoluta, sino que depende de las preferencias personales y las condiciones de salud de cada individuo. También debes investigar y tener en cuenta lo que recomienda la ciencia.

Así que, la próxima vez que dudes si arreglar tu cama inmediatamente o dejarla desordenada por un rato, ten en cuenta tanto los beneficios psicológicos como las implicaciones de salud que la ciencia ha sacado a la luz.

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