La búsqueda por bajar de peso puede ser frustrante y, a veces, complicada. Pero, según la ciencia, un pequeño cambio de hábito puede darnos un impulso que marcará la diferencia, o por lo menos eso marca un nuevo estudio sobre lo que bebemos.
Akira Takahashi, médico investigador del Hospital Neuroquirúrgico Tesseikai de Japón, investigó el efecto que tiene reemplazar el agua por agua carbonatada, conocida también como soda o agua con gas, y llegó a conclusiones extremadamente interesantes.
Los resultados demostraron un efecto claro en beber agua carbonatada en vez de agua natural, pero sólo como complemento de una dieta balanceada si lo que buscamos es bajar de peso. Por sí sola, no es una solución mágica.
Qué dice la ciencia sobre el agua carbonatada y la baja de peso
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La ciencia indica que el agua con gas ayuda -un poco- a bajar de peso.
El investigador fue claro a la hora de hablar de los resultados obtenidos: "El impacto del CO2 en el agua carbonatada no es una solución independiente para perder peso". "Una dieta equilibrada y actividad física regular siguen siendo componentes cruciales para un control de peso sostenible", explicó.
Sin embargo, la ciencia es clara. Cuando bebemos agua con gas, el dióxido de carbono (CO2) ingresa a nuestro torrente sanguíneo, y los glóbulos rojos la convierten en bicarbonato, lo que reduce la acidez de las células y, posteriormente, aumenta la rapidez con la que se utiliza la glucosa, lo que significa que queda menos azúcar en forma de grasa.
"El CO2 en el agua carbonatada puede promover la pérdida de peso al mejorar la absorción de glucosa y el metabolismo en los glóbulos rojos", escribió Takahashi en su artículo publicado en BMJ Nutrition.
"Sin embargo, la cantidad es tan pequeña que es difícil esperar efectos de pérdida de peso únicamente del CO2 en el agua carbonatada", agregó.
Las conclusiones del estudio
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En las conclusiones del estudio se explica lo que sucede con lujo de detalle: "El CO2 del agua carbonatada puede favorecer la pérdida de peso al convertirse en HCO3- en los glóbulos rojos y aumentar el pHc para mejorar la glucólisis".
Además se explica que "debido a que esta glucólisis debida al CO2 consume menos calorías, debe integrarse en una estrategia más amplia de vida saludable en lugar de considerarse como una herramienta principal para perder peso. Es necesaria más investigación para comprender mejor sus efectos a largo plazo y optimizar su papel en las intervenciones dietéticas".
Por lo pronto, estamos seguros de que tomar agua congas en vez de agua natural ayuda -en algo- a la pérdida de peso.
