Este descubrimiento en el océano desafía todo lo que se sabía sobre el comportamiento de la especie, ya que se pensaba que las rayas no se acercarían a un volcán submarino activo. Sin embargo, la situación resultó ser todo lo contrario, pues la cercanía al volcán no solo proporciona protección, sino también una fuente de calor que acelera el proceso de incubación de los huevos.
¿Qué implicancia tiene este volcán bajo el océano?
La mayoría de los volcanes son estudiados y seguidos de cerca con el objetivo de conocer sus movimientos y prevenir cuando vayan a hacer erupción. Sin embargo este se caracteriza por:
- Ubicación: el volcán submarino se encuentra a 1.500 metros de profundidad en el océano Pacífico.
- Actividad térmica: aunque se pensaba que estaba inactivo, el volcán emite calor, creando un ambiente ideal para la incubación.
- Incubación acelerada: el calor proveniente del volcán parece acelerar el desarrollo de los huevos, reduciendo el tiempo de incubación.
Este descubrimiento abre nuevas puertas al estudio de los ecosistemas volcánicos bajo el océano y su relación con las especies marinas, mostrando que la naturaleza siempre tiene sorpresas ocultas.