Quienes lucen pulseras de plata en sus muñecas suelen enfrentarse a un problema cada vez más difícil de erradicar: las manchas que le quitan brillo y las transforman en piezas opacas. Sin embargo, hoy te contaremos el truco de expertos en joyas que nos permitirán hacer una limpieza efectiva de la alhaja y dejarla como nueva.
Dale a tus pulseras de plata el brillo que se merecen.
Una técnica segura para la limpieza de esta joya radica en el uso de un ingrediente que todos tenemos en casa, combinado con un tipo de papel que garantizará un resultado económico y efectivo, sin riesgo alguno de dañar el aspecto de la pulsera de plata.
¿Cómo limpiar una pulsera de plata?
Gracias a la combinación del bicarbonato de sodio y el papel de aluminio obtendremos una pulsera de plata totalmente brillante y sin rastros de manchas. Esto se debe a la reacción química entre ambos materiales, logrando una oxidación de la plata. Además, también necesitaremos de agua caliente, un paño suave y un pequeño recipiente.
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El procedimiento es sencillo. El primer paso consistirá en forrar el fondo del recipiente con papel de aluminio, con la parte brillante hacia arriba. Esta parte del papel entrará en contacto con la joya.
A continuación, llenar el recipiente con agua caliente para posteriormente agregar el bicarbonato de sodio. Experto en el cuidado de joyas recomiendan respetar la siguiente regla: una cucharada del polvo blanco por cada litro de agua caliente. Después tendremos que colocar la pulsera dentro, asegurándote de que toque el papel.
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Dejaremos reposar la pulsera de plata durante 15 minutos. Una vez transcurrido el tiempo, retirarla y enjuagar con agua fría. Posteriormente, secar con un paño suave, evitando siempre frotar con materiales ásperos que puedan rayar la superficie de la alhaja. Así nos aseguraremos dejar la joya como nueva, sin rastros de suciedad.