Cuándo y cómo observar el encuentro celestial
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La alineación entre Marte y la Luna alcanzará su punto máximo después de las 10 de la noche. El par celestial comenzará a elevarse en el horizonte este-noreste, regalándonos varias horas de observación. La posición de la Tierra respecto a Marte durante este período resulta especialmente favorable, lo que aumentará el brillo aparente del planeta rojo.
Para aprovechar al máximo esta oportunidad única, los expertos en astronomía recomiendan:
- Elegir un lugar alejado de la contaminación lumínica, como parques o campos abiertos
- Utilizar binoculares o telescopio para distinguir detalles como los cráteres lunares
- Vestir ropa abrigada y llevar una silla o manta para mayor comodidad
- Preparar bebidas calientes y algunos bocadillos para hacer más agradable la espera
- Llegar al punto de observación unos minutos antes para que los ojos se adapten a la oscuridad
Un mes repleto de maravillas celestiales
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El fenómeno astronómico será visible sin ayuda de equipo especial.
La astronomía nos tiene preparadas más sorpresas para este mes. El 22 de noviembre, la galaxia de Andrómeda, nuestra vecina cósmica más cercana, brillará en todo su esplendor. Este objeto celeste aparecerá como una tenue mancha de luz en la constelación que le da nombre, visible para quienes observen desde lugares alejados de las luces urbanas.
El equipamiento óptico permitirá apreciar el brillante núcleo de Andrómeda e incluso algunas de sus galaxias satélite. Esta observación nos conecta directamente con uno de los objetos más emblemáticos del espacio profundo visible desde la Tierra.
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Las maravillas continúan el 25 de noviembre, cuando Venus se una a la luna creciente en otra conjunción espectacular. El planeta más brillante de nuestro sistema solar se podrá apreciar justo debajo del delicado arco lunar, cerca del horizonte occidental tras la puesta del sol. El brillo incomparable de Venus, combinado con la luz plateada de la luna, creará una imagen digna de ser recordada.
