Muchos de los denunciantes por estafas habían pagado por viajar a Punta Cana, entre otros destinos turísticos. Imagen ilustrativa.
Foto: Gentileza
La Justicia libró este jueves la orden de captura contra el empresario mendocino acusado por una treintena de clientes por el delito de estafas con viajes al exterior cobrados anticipadamente.
Lo informó la Unidad Fiscal de Delitos Económicos. Pedro Guillén también había sido denunciado ante la Justicia por un proveedor mayorista de servicios aéreos y hotelería, aunque por otro presunto delito: fraude.
De acuerdo a la información oficial, el empresario está implicado en causas por estafas en perjuicio de 80 personas por un total de 175.560 dólares y $25 millones.
En las últimas horas, un estudio de abogados se contactó con la Fiscalía investigadora con la intención de sondear si Pedro Guillén, el denunciado por estafas, seguiría en libertad en caso de presentarse voluntariamente en el Polo Judicial. Pero la gestión no pasó de ahí. Nada por escrito y nada formal; es decir, nada que resolver.
De acuerdo a la pesquisa, la situación procesal por estafas del dueño de Guillén Enterprise Viajes y Turismo se complica con el paso del tiempo.
Ya se dictó la prohibición de salir del país mientras acumula más de 30 denuncias penales de clientes que aseguraron haberle pagado anticipadamente la totalidad del precio por paquetes de viajes al exterior que nunca pudieron disfrutar debido a la cancelación de todos los servicios a Punta Cana, México y Disney, entre otros destinos.
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Punta Cana, uno de los destinos elegidos por los clientes que denunciaron al empresario por estafas.
Denunciado por estafas con viajes y ahora por fraude
La empresa Guillén Enterprise Viajes y Turismo, con domicilio comercial en el edificio BUCI de Ciudad, cerró sus puertas, página web y redes sociales el 17 de enero último tras emitir un comunicado por la "cancelación de los servicios contratados hasta el 28 de febrero por motivos financieros".
Algunos clientes habían sido contactados por teléfono, pero nadie recuperó ni un billete de todo lo pagado. Y así multiplicado por varios miles de dólares.
Pidió custodia policial en la zona y atribuyó la no prestación de los servicios turísticos a un proveedor mayorista de boletos por avión y alojamiento en hotelería, a quien acusó y responsabilizó de no poder cumplirles a sus clientes.
La reacción del aludido no se hizo esperar: se presentó en la Unidad Fiscal de Delitos Económicos para denunciar a Guillén por fraude y argumentó que este lo había engañado con pagos y cancelaciones anteriores.
