La felicidad de los gatos se relaciona con su bienestar físico, emocional y su entorno. Por eso muchas personas se preguntan sobre estas mascotas: ¿Cuáles son las señales para saber si mi gato es feliz?.
La felicidad de los gatos se relaciona con su bienestar físico, emocional y su entorno. Por eso muchas personas se preguntan sobre estas mascotas: ¿Cuáles son las señales para saber si mi gato es feliz?.
Para los gatos, ser feliz implica sentirse seguros, cómodos y estimulados. La felicidad de un gato se manifiesta cuando tiene un ambiente seguro, comida adecuada, oportunidades para jugar, y la compañía de personas o animales con quienes se siente cómodo. Está demostrado que un gato feliz tiene una mejor salud y una vida más larga. Esto se refleja en una esperanza de vida media de entre 13 y 17 años, e incluso algunos felinos logran vivir 20 años o más.
►TE PUEDE INTERESAR: Estudio científico revela que los gatos domésticos son más inteligentes que los niños
Ahora bien, si queremos saber si un gato está realmente feliz, hay que observar sus comportamientos y se obtendrá una idea clara de si disfrutan su vida. Algunas de las pistas para este interrogante se descubren al prestar atención a su lenguaje corporal.
Un artículo publicado en el sitio Natures Variety explica que cuando los gatos se ponen boca arriba, muestran un nivel profundo de confianza. Esta postura indica que el felino no percibe ninguna amenaza en su entorno y se siente lo suficientemente cómodo para exponer su abdomen, una de las partes más sensibles de su cuerpo. Este comportamiento es un claro indicativo de que el animal, además de sentirse feliz, está seguro y protegido.
Otro comportamiento que refleja felicidad es cuando el gato se frota contra el cuerpo de su humano responsable. Esta conducta es más que una forma de saludo, es una manera de marcar con su olor, mediante las glándulas que tiene en su cabeza y cuerpo, que indica apego, pertenencia y bienestar.
El típico ronroneo, también, es una manifestación clara de entusiasmo, comodidad y bienestar. Es una señal auditiva importante que indica que el gato se siente relajado, seguro y feliz en su entorno. Este sonido suele producirse cuando el animal es acariciado o está cerca de alguien en quien confía, lo que refuerza el vínculo afectivo con su dueño.
En tanto, cuando el amigo peludo busca jugar, ya sea con sus juguetes, otros gatos, perros u otros integrantes de la familia, demuestra un estado óptimo de bienestar físico y emocional. Este comportamiento indica que el gato se siente seguro, tiene energía acumulada que necesita liberar, y desea mantenerse mentalmente estimulado y físicamente activo, lo cual es fundamental para su salud general.
►TE PUEDE INTERESAR: ¿Para siempre? No podrás creer cuánto tardan perros y gatos en olvidar a sus dueños
Finalmente, la higiene es fundamental para los gatos porque les permite mantener su piel y pelaje en óptimas condiciones. Mantenerse limpio y cuidar su pelaje, además de ser un signo de bienestar físico, también lo es de estabilidad emocional.
Sin embargo, los gatos pueden experimentar infelicidad o estrés. Para el sitio Feliway, los signos para detectar este tipo de emoción incluyen conductas como arañar en exceso zonas de la casa, como marcos de puertas y muebles, orinar en lugares inadecuados como las paredes, esconderse repetidamente durante el día en sitios como el armario, rechazar la comida, mostrar una disminución notable en su nivel de actividad, comer en exceso como forma de consuelo, o incluso lamerse de manera compulsiva. Estos comportamientos son indicadores claros de que el gato podría atravesar una situación de malestar emocional o físico.