limonero-jardin.jpg
Para tener limones jugosos, debes cuidar muy bien esta planta.
¿Qué le pasa a mi limonero?
Puede ser que hayas visto que las hojas de tu limonero sus hojas se arrugan, o se ponen amarillas, e incluso en casos muy extremos, la corteza se empieza a escamar. Esto se debe a enfermedades que atacan esta especie de árbol. El canal especializado de YouTube EcologíaVerde nos cuenta cómo identificar los motivos por los que un limonero puede enfermar, y sus soluciones.
Las hojas arrugadas pueden ser una señal de que una plaga, como la polilla minadora, lo está enfermando. Este tipo de insectos se alojan por debajo de la hoja y hacen que éstas se vayan arrugando progresivamente al mismo tiempo que se ponen marrones. Al final, la hoja se marchita y cae.
La solución para combatir las plagas minadoras es muy sencilla: aplica aceite de Neem. En un litro de agua disuelve entre 3 y 5 ml de aceite de Neem y con un atomizador rocía generosamente las hojas. El aceite de Neem es fácil de encontrarlo en cualquier vivero.
Dos plagas peligrosas para esta planta
Otro de los motivos por los cuales tu limonero puede enfermar es por el hongo Alternaria. Y su solución es la más sencilla de todas: no lo riegues demasiado. La enfermedad por este hongo se manifiesta arrugando las hojas y volviéndose amarillas hasta que el árbol se debilita completamente y muere.
limonero-enfermo.jpg
Las hojas amarillas son un signo de que tu limonero está enfermo.
Alerta máxima si a tu limonero se le escama la corteza. Puede indicar que tenga una enfermedad viroide y eso hace que aparezcan grietas en sentido vertical. Otro de los síntomas para identificar si tu árbol padece esta enfermedad es el enanismo en los brotes jóvenes y las manchas amarillas. Desgraciadamente, la única solución posible es eliminar el árbol, sobre todo si cerca de ese tienes otro limonero ya que los virus pueden ser muy contagiosos.
Embed - PLAGAS y ENFERMEDADES del LIMONERO (Cómo Combatirlas)
Estas son algunas de las afecciones que puede padecer tu limonero. Sólo ten a mano aceite de Neem, no lo riegues demasiado y disfruta de todo su esplendor como de sus frutos.