Los 8 rugbiers condenados por la muerte de Fernando Báez Sosa, recibieron un revés judicial. La Corte Suprema de Justicia, ratificó sus respectivas condenas.

La Corte Suprema rechazó un pedido de recusación que habían hecho los rugbiers condenados por el crimen de Fernando Báez Sosa, contra los jueces de la Cámara de Apelaciones y Garantías en lo Penal de Dolores que intervinieron en el juicio.

Fernando Baez Sosa fue asesinado en Villa Gesell en enero de 2020 por un grupo de rugbiers.jpg
Caso Fernando Báez Sosa: los 8 rugbiers condenados recibieron un revés judicial

Caso Fernando Báez Sosa: los 8 rugbiers condenados recibieron un revés judicial

Según el documento al que accedió tn.com.ar, los magistrados del máximo tribunal de Justicia, Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, denegaron el recurso por considerarlo “inadmisible”.

La presentación había sido deducida por la defensa de Máximo Thomsen, Ayrton Viollaz, Ciro Pertossi, Lucas Pertossi, Matías Benicelli, Blas Cinalli y Luciano Pertossi, liderada en su momento por el abogado Hugo Tomei.

También habían recurrido ante la Cámara de Casación Penal para pedir que los integrantes de la Sala II de Apelaciones sean apartados para intervenir en los futuros fallos, y luego presentaron un recurso extraordinario ante la Suprema Corte de Justicia Bonaerense.

Caso Fernando Báez Sosa: las condenas recibieron cada uno de los rugbiers

Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Matías Benicelli, Luciano Pertossi y Enzo Comelli fueron condenados en febrero de 2023 por el Tribual N°1 de Dolores a prisión perpetua por el delito de “homicidio agravado por el concurso premeditado de una o más personas con alevosía”.

Luego, la Cámara de Casación bonaerense quitó la alevosía, pero mantuvo la pena. Del mismo modo, Lucas Pertossi, Blas Cinalli y Ayrton Viollaz recibieron 15 años de cárcel.

En marzo del 2024, Casación revisó la sentencia del tribual N°1 de Dolores y confirmó cada una de las penas, pero realizó una modificación. Los ocho rugbiers estaban condenados por homicidio agravado por el concurso premeditado de una o más personas con alevosía, pero los jueces determinaron que ese agravante no se pudo comprobar.