La carne del asado se puede salar antes, durante o después de llegar a la parrilla.
Cada persona que se para frente a la parrilla para hacer un asado, sabe que tiene una linda responsabilidad por delante, ya que el buen comer de todos los comensales, dependerá de las habilidades del asador para sacar la mejor carne.
El buen asador utiliza toda su experiencia para que el asado salga lo mejor posible y dejar a todo el mundo contento.
Pero como sobre gustos no hay nada escrito, desde la elección de la carne que se va a comprar, hasta las mañas a utilizar en el encendido del fuego y la cocción en los fierros calientes, todo asador sacará lo mejor de sí para que el asado salga para chuparse los dedos.
Entre todos los pasos que lleva un asado, hay uno que es muy importante y nadie le presta demasiada atención.
Los que más saben presentan distintas teorías sobre cuál es el mejor momento para salar la carne, una acción que puede llegar a ser crucial para la cocción de las carnes, sobre todo los cortes que son más gruesos, como un vacío entero, por ejemplo.
Asado: cuál es el mejor momento para salar la carne
Muchos se preguntan cuándo es el mejor momento para salar la carne en un asado: ¿antes, durante o después?
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Lo cierto es que cada momento tiene sus cualidades y todo asador debería saber qué características pueden presentar las carnes, dependiendo el momento que recibe la sal:
Las personas que deciden colocarle la sal recién al final, cuando la carne deja de tocar la parrilla, argumentan que lo hacen así porque si la colocan al principio, con la carne cruda, esta hará que se liberen ciertos jugos, haciendo que el corte quede más seca y dura.
Otros señalan que colocarle una buena capa de sal al principio, con la carne cruda, se formará una capa de sal que hará que no salgan los jugos y la carne salga tierna. Entienden que la carne solo absorberá la cantidad de sal necesaria.
Después están los asadores que deciden salar la carne cuando esta ya supero un buen tiempo en la parrilla. Afirman que, de esa manera, la sal no absorberá el jugo de la carne y evitará que se ponga dura.
