Los alumnos que ingresan a la UNCuyo pueden demorar 80% más de tiempo en recibirse de lo que en teoría dura su carrera. Es decir que si el plan de estudio se extiende por 5 años (en la mayoría de las carreras de grado esto es así) en la UNCuyo, tardan entre 8 y 8 años y medio para obtener el titulo. En algunas carreras, llegan a los 9 años.
Esto, lejos de hacer que la Universidad expulse al alumno, lo que plantea es un desafío para ayudarlo a concluir sus estudios.
UNCuyo: dos tipos de demoras en las carreras
Aguirre detalló que, en general, hay dos tipos de indicadores para tener en cuenta en los atrasos: los que ocurren en los primeros años y los que aparecen cuando se trata de un alumno avanzado.
Entre los primeros, el motivo es que no se han terminado de adaptar al ritmo universitario y rinden una materia como para no quedar completamente desvinculados de los estudios.
En cambio, los alumnos que se atrasan hacia e final del cursado, es generalmente porque entraron a trabajar. Los atrasos son mayores cuando el trabajo que ejercen coincide con lo que están estudiando.
►TE PUEDE INTERESAR: Gabriel Fidel en la marcha universitaria: "La educación es inversión, no es un gasto"
Tal y como lo explicó el secretario, las demoras se hacen mayores en carreras humanísticas, artísticas o educativas, en las que el título no necesariamente es habilitante para ejercer.
En cambio, en carreras como medicina y las de Ciencias de la Salud, Ingeniería, y las tecnicaturas del ITU, la demora es prácticamente cero. Esto porque, en el caso de las primeras mencionadas, sin título no se puede ejercer. y en las tecnicaturas, porque están pensadas para el mundo del trabajo y quienes las siguen, tienen como objetivo insertarse laboralmente.
Sinceramiento curricular, un camino para acortar las demoras
Esta iniciativa apunta a sincerar la duración real de las carreras por sobre la teórica, desde la perspectiva del aprendizaje centrado en el estudiante y en base a la educación por competencias. El objetivo es revisar los procesos de desarrollo curricular para el grado y pregrado de la Universidad.
La intención es revisar cuánto dura una carrera en teoría y cuánto se demoran los estudiantes realmente en terminarlas y a partir de este sinceramiento, buscar mecanismos para intentar reducir la duración de las mismas, para lo que hay que efectuar una revisión profunda de las currículas.
Esta fue una de las propuestas de campaña de la actual rectora Esther Sanchez y su decisión es que se pueda poner en marcha durante el tiempo que dure su gestión.