La historia más popular y difundida, que es utilizada como excusa para cada 14 de febrero realizar regalos y festejos románticos, se remonta a la Roma del siglo III durante la expansión del Cristianismo en el mundo. El emperador Claudio II el Gótico promulgó una ley que prohibía a los jóvenes contraer matrimonio para que se alistaran en el ejército.
Un sacerdote muy joven llamado Valentín, en contra del emperador, comenzó a casar jóvenes enamorados a escondidas. San Valentín fue arrestado, confinado y finalmente decapitado un 14 de febrero del año 269.
En la actualidad, San valentín moviliza al mundo entero. Millones de parejas celebran el hecho de estar juntos y brindan un homenaje al amor. Además, los negocios, restaurantes, tiendas y centros comerciales preparan distintas campañas de promoción y ofertas para este día tan especial.
4 regalos que nunca deberías obsequiar a tu pareja en San Valentín
Existe una lista de regalos clásicos de San Valentín que nunca fallan. Flores, chocolates, cenas románticas, viajes de amor y manualidades creativas. Pero, además hay una corta lista de regalos que nunca, bajo ningún punto, deberías regalar (a menos que quieras separarte).
A continuación vas a conocer los 4 regalos prohibidos de San Valentín. No es recomendable elegir uno de ellos ya que demuestran falta de conocimiento, generan incomodidad y pueden llevar a la disputa.
- Libros de autoayuda o de salud mental: si quieres quedar bien con tu pareja intenta no regalar libros de superación personal o autoayuda. Es uno de los regalos menos románticos y personalizados del mundo.
- Nunca regales electrodomésticos: los electrodomésticos son una opción bastante fría e impersonal. Tu pareja puede pensar que no la conoces. Además, el electrodoméstico es un regalo para la casa, no para la otra persona.
- Dinero en un sobre: si quieres dar por finalizada tu relación, coloca dinero en un sobre de papel y obsequiale a tu amor. Este es uno de los regalos más horrendos y tristes. Regalar dinero es una muestra de desinterés por los gustos y necesidades del otro.
- Ropa interior para San Valentín: la ropa interior como regalo depende de la confianza de la pareja. Al igual que los perfumes, es un elemento muy personal que es mejor no regalar si llevas poco tiempo con esa persona.