Netflix y Jason Momoa brillan con esta espectacular producción de gran acción y giros inesperados. Un escenario postapocalíptico sumamente singular
Jason Momoa y Netflix sobresalen con Amores caníbales, una gran película de gran acción. Un mundo postapocalíptico extremadamente singular.
Suki Waterhouse, Jason Momoa, Keanu Reeves y Jim Carrey protagonizan Amores caníbales, la última película de Netflix donde los ‘defectuosos’ son vertidos al desierto, donde las únicas opciones son sobrevivir o morir.
Desterrada a un páramo de indeseables, una joven trata de salir adelante entre la comunidad del desierto, asolada por las drogas, y un enclave de caníbales.
En Amores caníbales, Amirpour nos inserta en un escenario postapocalíptico sumamente singular. En un futuro no muy lejano, los sujetos considerados como inservibles han sido expulsados de la sociedad siendo marcados de por vida con un número.
La razones detrás de estos destierros no están del todo claras, pero mientras vamos dando un vistazo a las personas que ahora viven al margen podemos deducir que se trata de un grupo de desadaptados que se han negado a someterse a las reglas e imposiciones sociales.
Según la sinopsis del sitio especializado en series y películas, lavanguardia.com, en Amores caníbales nos situamos en una sociedad postapocalíptica, en el desierto de Texas. Allí vive una comunidad caníbal con la que se encuentra Arlen, una desterrada solitaria que durante sus días en el desierto se hace amiga de una niña y su mascota.
El líder de la comunidad se interesa por esta extraña pareja cambiando la vida de Arlen para siempre.
El amor, la toma de decisiones y la búsqueda de la verdad serán algunas de las tantas cosas que tendrá que afrontar la protagonista.