Roberto Naciff renunció para jubilarse luego de más de 30 años en la Justicia Federal. El largo proceso para elegir al sucesor
La Justicia Federal de Mendoza tiene otra vacante tras la renuncia del camarista Roberto Naciff.
Foto: Axel Lloret /Diario UNORenunció para jubilarse Roberto Naciff, camarista de la Justicia Federal que participó del primer juicio por crímenes de lesa humanidad realizado en Mendoza en 2010.
Con más de 30 años de carrera, el renunciante Naciff fue secretario judicial de primera instancia y luego de la Cámara Federal de Apelaciones, hasta que llegó al Tribunal Oral Federal 2, donde participó de varios debates por asuntos penales como vocal y presidente.
Durante los últimos años, Naciff cobró notoriedad pública por quedar al margen, a instancias del fiscal Dante Vega, del Tribunal que juzga al ex juez federal Walter Bento por delitos de corrupción, proceso en desarrollo desde 2023.
Otra perlita: en 2022, Naciff ganó un viaje para asistir al Mundial de Fútbol en Qatar, con todo pago, tras un sorteo organizado por el canal televisivo TyC Sports.
La salida del renunciante juez Naciff deja incompleto al Tribunal Oral Federal 2 de Mendoza, por lo que el Consejo de la Magistratura del Poder Judicial de la Nación deberá llamar a concurso público de oposición y antecedentes.
Mientras este proceso se desarrolla y culmina en el Senado nacional -se prevé que se extenderá al menos un año-, los camaristas Fabián Cortés y Pablo Salinas serán acompañados por un tercer magistrado subrogante elegido de entre los titulares de los Tribunal Orales de San Rafael, San Juan o San Luis.
Esta experiencia no será la primera en Mendoza ya que el Tribunal Oral Federal 2 finalmente constituido para juzgar al ex juez federal Bento quedó integrado por tres camaristas de San Luis y San Juan como consecuencia de la ola de excusaciones y recusaciones que alejaron a los titulares y suplentes que ejercen en la Justicia Federal de Mendoza.
Gretel Diamante, Eliana Rattá y Carolina Pereira juzgan a Walter Bento y a otros veinticinco imputados desde 2023. La cuarta jueza, designada en carácter de suplente, también es foránea: la cordobesa Carolina Prado.
La renuncia del camarista Roberto Naciff pone, nuevamente, a la Justicia Federal de Mendoza en la repetida e incómoda posición de esperar bastante hasta que llegue sucesor y de recargar a otros magistrados titulares en otros Tribunales Orales Federales.
Los procesos de selección de nuevos magistrados federales son largo -o larguísimo- aliento porque comienzan y terminan en Buenos Aires, con altísima injerencia de la política.
Desde el llamado a concurso, la calificación de los exámenes y la elaboración de ternas de aspirantes -todo esto a cargo del Consejo de la Magistratura-; hasta la aprobación o rechazo en el Senado de la Nación, habiendo pasado por una instancia clave: la elección, a cargo del Poder Ejecutivo Nacional, de uno de los ternados por el Consejo evaluador.
Para muestra de lo que tarda Buenos Aires en designar un juez federal para Mendoza, un botón: el Juzgado Federal 1 de Mendoza en materia Penal y con competencia electoral cumple esta semana 16 meses sin juez titular tras la destitución y detención de Walter Bento, en 2023.
Desde mayo de 2023 -cuando Bento fue suspendido- los expedientes electorales quedaron a cargo del magistrado civilista Pablo Quirós y los penales en manos de Marcelo Garnica.
Los aspirantes rindieron el examen del concurso 501 en la Facultad de Derecho de la UNCuyo en agosto de 2024 -tras 9 meses de vacancia- pero el proceso sigue detenido en Buenos Aires por la falta de un informe clave para definir la terna que el Consejo deberá enviar a Javier Milei.
Otra referencia clara: en Mendoza esperan como desde 2021 porque en Buenos Aires se demora la selección de 3 nuevos integrantes de la Cámara Federal de Apelaciones de Mendoza, que cubrirán las vacantes que dejaron Juan Antonio González Macía y Olga Arrabal (por renuncia) y Alfredo Porras (por fallecimiento).
Hoy, la pelota está en la cancha de Javier Milei, que ya recibió los informes finales del Consejo de la Magistratura y deberá elegir a 3 aspirantes y postularlos en el Senado nacional, que aprobará o rechazará.
Teniendo en cuenta lo tirante de la relación entre el Presidente de la Nación y el Senado por las designaciones por decreto de Lijo y García Mansilla para la Corte nacional, entre otras cuestiones políticas, todo indica que la Justicia Federal de Mendoza deberá seguir esperando hasta que escampe el temporal.