El Ministerio de Energía y Ambiente confió que ya analiza uno de los tres contratos de cesión de áreas maduras de Mendoza que firmó YPF con privados.
A mediados de agosto, YPF ya había firmado los tres contratos con empresas petroleras para ceder parte de las áreas maduras que concesiona en Mendoza. Sin embargo, a un mes de las primeras ventas, en el Gobierno no cuentan con toda la documentación para aprobarlas.
Los tres acuerdos se firmaron como parte del Proyecto Andes que encaró YPF para desprenderse de áreas de petróleo convencional y dedicarse, casi con exclusividad, a la exploración y explotación del no convencional, que hoy le es más redituable.
Para que la cesión de la petrolera estatal a los privados se concrete, el Gobierno de la Provincia –que en definitiva es la dueña del recurso- debe dar su visto bueno.
Desde YPF confiaron a Diario UNO que los tres contratos ya estaban siendo analizados por el Ministerio de Energía y Ambiente de Mendoza; pero desde allí aseguraron que por mesa de entradas de la dirección de Hidrocarburos de Lucas Erio solo pasó el del clúster Llancanelo.
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YPF tiene vigente un proyecto de inversión con reducción de regalías en Llancanelo. Mendoza analiza la cesión de sus áreas petroleras a un privado.
Demoras en la cesión de áreas maduras de YPF
Mientras esperan por el resto de los contratos, los equipos técnicos de la cartera de Energía y Ambiente de Jimena Latorre trabajan en el análisis de la cesión de dos áreas de crudo pesado de Llancanelo a Petroquímicos Comodoro Rivadavia (PCR), una firma centenaria controlada por las familias Brandi y Cavallo. Su presidente y CEO es Martín F. Brandi.
Las áreas en cuestión están ubicadas en las cercanías a la ciudad de Malargüe, poseen un crudo pesado de 12 grados API y hasta 10 mil centipoise de viscosidad con un rango de profundidad del orden de los 600 a los 1000 metros; lo que lo convierten en un bloque único pero desafiante.
El área produce 1.818 barriles por día y 2 km3 de gas.
Parte del estudio que Mendoza realiza sobre esta área en particular tiene que ver con que existe un proyecto de inversión vigente presentado por YPF, que debería ser respetado por el nuevo propietario.
Ese proyecto se firmó en 2019 e implicaba un compromiso por parte de Mendoza de reducción de regalías por lo costosa que resulta la operación de extracción.
Como ese pacto está “vivo”, el nuevo inversor, que absorberá derechos, también debería cumplir con el plan y las obligaciones a las que se comprometió YPF.
¿Y los otros dos contratos?
Si bien en principio se esperaba que YPF se desprendiera de 55 áreas maduras en septiembre, al menos en Mendoza ese proceso está más demorado.
La selección de los ganadores del Proyecto Andes se conoció en agosto, pero el envío de la documentación a la provincia no se dio de manera inmediata, aunque fuentes consultadas de YPF dieron a entender lo contrario.
Lo que pudo saber Diario UNO es que, además de la llegada del contrato de Llancanelo, en las últimas horas medió un acercamiento de los ganadores de los clústers Mendoza Norte y Mendoza Sur y que ambas empresas aún están ajustando detalles del proyecto para presentarlo al Gobierno mendocino para su aprobación.
El Portón es parte del clúster Mendoza Sur que YPF pactó ceder a Quintana y TSB como parte del Proyecto Andes para desprenderse de áreas petroleras maduras.
Quintana Energy es una petrolera con presencia de 30 años en Santa Cruz, que en 2021 fue adquirida por un grupo de ingenieros en petróleo liderado por Carlos Gilardone. También opera pozos de petróleo en el área San Sebastián, al sur de Chile.
TSB, en tanto, es propiedad del empresario Claudio Urcera -suegro de Nicole Neumann-. Y es una de las principales empresas de servicios petroleros de la cuenca neuquina.
El clúster Sur es uno de los de mayor proyección en Mendoza. Está ubicado en la cuenca neuquina, a orillas del río Colorado, y comprende El Portón, Chihuido de la Salina, Altiplanicie del Payún, Cañadón Amarillo, Chihuido de la Salina S y Confluencia Sur.
El bloque de 1.911 km2 que abarca el clúster Norte comprende áreas en Barrancas, Río Tunuyán, Ceferino, Mesa Verde, La Ventana y Vizcacheras. Es una zona histórica y actualmente sus áreas son las que mayor producción arrojan -11,25 barriles diarios de petróleo y 99 km3/d de gas distribuidos- pero, el 98% del total de líquidos que se extraen son agua, lo que le baja el potencial.
Petróleos Sudamericanos es una compañía de energía dedicada a la exploración, explotación y operación de campos maduros. La empresa es dirigida por la familia Miedvietzky. Su presidente es Pablo y el vice Alejandro. También son referentes de Amarilla Gas, uno de los principales distribuidores de gas licuado de petróleo.
Esta firma actualmente opera solo en Río Negro áreas convencionales con potencial de crecimiento.
