A ese lugar donde los vecinos se habían juntado llegó la joven de 20 años llegó en un micro. Aseguraron que estaba muy alterada, pero a pesar de eso, les contó que un hombre que vive hace poco en el barrio la había interceptado y metido a su casa a la fuerza, donde fue abusada sexualmente durante varias horas hasta que pudo escapar.
abuso sexual Las Heras.jpg
La casa del hombre acusado de secuestro y abuso sexual fue allanada por la Policía.
Foto: Matías Pascualetti/ Radio Nihuil
Ante las preguntas de las personas, la chica les detalló quién era el agresor y señaló cuál era la casa donde estuvo secuestrada. Sin dudarlo se fueron hasta allí para ir a buscar al hombre, pero a los pocos minutos llegó la Policía.
Muy enojados y molestos les reclamaron por la falta de seguridad, y la situación escaló a tal punto que debió interceder Infantería para calmar a las personas que protestaban a raíz del secuestro y abuso sexual de la joven.
Una denuncia por secuestro y abuso sexual causó revuelo en Las Heras
Mientras la Policía controlaba el malestar de los vecinos y familiares de la víctima, la joven fue trasladada a un centro asistencial junto a sus padres. Allí fue revisada y atendida tras el abuso sexual que sufrió, y luego sería revisada por especialistas del Cuerpo Médico Forense para determinar las lesiones que sufrió tras el ataque.
allanamientos policia mendoza y federal barrio Santa Teresita Las Heras.jpg
Tras la denuncia de secuestro y abuso sexual de la víctima de 20 años, la Policía rastrilló la zona para encontrar al agresor. Imagen ilustrativa.
Al mismo tiempo, los investigadores actuaron en El Borbollón para atrapar al presunto autor que fue señalado por la víctima e hicieron un allanamiento en su casa, pero no lo encontraron.
Algunos testigos señalaron que el presunto autor del abuso sexual había escapado por los techos y la Policía hizo un intenso rastrillaje en la zona, pero los resultados fueron negativos.
"Se escapó por un descampado muy amplio y sin luz que está atrás de su casa", señaló una vecina. Otra aportó que cuando escapó gritó que estaba armado. A pesar de esto, y del enojo con la Policía, colaboraron con los rastrillajes con linternas por la zona.
Indicaron que hace unos 3 meses que el hombre vive en el lugar, que tiene entre 50 y 60 años, y sería empleado del ex Cose. Además, los vecinos estaban muy enojados con otro hombre que vive en el fondo de esa propiedad a quien no le creen que no haya escuchado nada durante todas las horas que la joven había sido secuestrada y víctima de abuso sexual.
