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La familia Jamison protagonizó la misteriosa desaparición.
La investigación tras la desaparición
La familia Jamison creían que su casa estaba poseída, según reveló un pastor que fue consultado por las autoridades. La niña tenía una amiga imaginaria a quien consideraban una entidad maligna. El padre compró una biblia satánica y planeaba un exorcismo, incluso buscando “balas especiales” para disparar a los espíritus.
Las cámaras de seguridad de la casa mostraron un comportamiento extraño el día de su desaparición. Los padres se movían como “zombis”, apáticos, mientras cargaban objetos al auto. En varias ocasiones, hacia el auto sin llevar nada, quedándose inmóviles mirando el horizonte.
El 16 de octubre, el auto de los Jamison fue hallado abandonado. Dentro estaba el perro, desnutrido, y una suma sorprendente: 32.000 dólares en efectivo, junto a celulares y otros objetos de valor.
En el auto también se encontró una carta de 11 páginas escrita por la madre de la familia, donde expresaba su frustración con el matrimonio y mencionaba el divorcio. Sin embargo, una amiga aseguró que escribir era su forma de desahogarse y que el amor entre ellos era genuino.
Una cámara en el vehículo tenía una foto reciente de la niña. Seguramente la última que le sacaron sin vida. En la imagen parece que está incómoda, como si la obligaran a sonreír.
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La niña de la familia desaparecida y la última foto que se conoce de ella.
La muerte de la familia desaparecida
El caso quedó en un punto muerto hasta el 16 de noviembre de 2013, cuando cazadores encontraron los restos de la familia Jamison a cinco kilómetros del auto. Los cuerpos, muy descompuestos, estaban alineados boca abajo. La causa de muerte no pudo determinarse debido al estado de los restos.
Nunca hubo respuestas certezas sobre la desaparición y muerte de la familia. Se sospechó sobre un culto de Oklahoma que los asesinó, pero no hay pruebas. Las teorías van desde un crimen pasional hasta un ritual, pasando por un posible vínculo con drogas. Sin embargo, el caso sigue abierto.