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La última imagen de la periodista antes del crimen.
Atroz crimen en Dinamarca
Tras la desaparición de la periodista, Peter Madsen declaró que la dejó en tierra el mismo día de la entrevista en horas de la noche. Pero llamó la atención que días después su submarino se hundió misteriosamente, en una clara búsqueda de eliminar evidencias.
Ese dato, más otras inconsistencias en las declaraciones del empresario, centraron la búsqueda de la mujer en el último lugar donde fue vista: el mar Báltico. El 21 de agosto, partes del cadáver de Kim Wall fueron encontradas en distintos sectores del agua.
Los estudios forenses no sólo confirmaron que se trataba de la periodista sino también de que había sido torturada y desmembrada antes de ser asesinada.
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Los protagonistas del crimen en el submarino.
La condena por el crimen
Todos los cañones apuntaron contra el empresario Peter Madsen. No sólo se encontraron rastros de ADN de la víctima en el cuerpo del hombre, sino también que se analizó su computadora donde se encontraron videos de tortura y decapitación que podría haber utilizado como inspiración.
El hombre fue juzgado a mediados de 2018 y recibió una pena de prisión perpetua por asesinato premeditado, trato indecente de un cadáver y agresión sexual. ¿Por qué cometió el crimen? Es tal vez la pregunta más difícil de responder, pero la principal teoría es que el empresario tenía fantasías sádicas que decidió llevar a cabo en su propio submarino, aislado del mundo, pensando que iba a quedar impune.