Una extraña actividad en la Maratón de Eugene, en Oregón.
Durante el domingo del último fin de semana se realizó la Maratón de Eugene en el estado de Oregón con la particularidad que contó con un activista político, que fue a acompañar a su mujer, quien llevó adelante una curiosa actividad para el mundo del atletismo: si eras corredor, podías proporcionarle un golpe a una figura de Donald Trump.
Sin ánimos de mezclar el deporte con tintes políticos, la propuesta fue bien recibida por los atletas quienes, luego de la competencia, manifestaron que repetirían la experiencia al punto de que se volverían a anotar si al final de la meta está el verdadero presidente. ¡Qué feo, violencia no!
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En una carrera de atletismo podías "pegarle" a Donald Trump.
Una carrera de atletismo en Estados Unidos te da la oportunidad de darle una piña a Donald Trump
La maratón cuenta con 42,195 metros donde las personas deben luchar contra su cabeza para lograr completarlos, más allá de las condiciones físicas que también son fundamentales en la búsqueda de alcanzar la meta. Es por eso que, quizás, el activista políticoPolitical Sculptor buscó una manera de motivar a los atletas.
Seguramente no todos acompañaron la iniciativa, sin embargo, el hombre escribió en sus redes sociales una vez consumada la actividad deportiva: "Los corredores le pegaron tan fuerte al saco con la cara de Trump que lo rompieron. Duró unos cuántos miles de puñetazos".
Muchos de los participantes también compartieron en sus redes el golpe a la bolsa de boxeo con el rostro del presidente Donald Trump que se volvió viral. Un usuario expresó: "Muchas gracias por su servicio", mientras que otro mencionó que esa actividad le daría energías para continuar con los 42,195 metros de la Maratón de Eugene en Oregón: "Esto me daría un subidón de energía, la verdad".
Algunos, los más violentos, dijeron que si el presidente Donald Trump estuviera en la meta correrían sin dudar una maratón, mientras que otras personas - en el anonimato que te da internet - hasta se animaron a proponer otros dirigentes políticos mundiales a los cuales les gustaría golpear.
