Fue un viernes de desahogo para el mundo Vélez. Tras la salida de Sebastián Domínguez, y a la espera de la oficialización de Guillermo Barros Schelotto como su reemplazante, el Fortín venció a San Martín de San Juan en el José Amalfitani.
Fue un viernes de desahogo para el mundo Vélez. Tras la salida de Sebastián Domínguez, y a la espera de la oficialización de Guillermo Barros Schelotto como su reemplazante, el Fortín venció a San Martín de San Juan en el José Amalfitani.
Tras seis derrotas y dos empates (y con cambio de entrenador incluido), el elenco de Liniers abrochó el primer triunfo del torneo Apertura de la Liga Profesional. Ante su gente, los locales se impusieron sobre los recién ascendidos por 1-0, gracias al tanto de Brian Romero.
Las emociones no solamente se dieron por la vuelta al triunfo luego de un comienzo para el olvido, sino también por el retorno a las canchas de Valentín Gómez, una de las figuras del equipo que se coronó campeón hace algunos meses.
Luego de su frustrado pase a la Serie A de Italia, el defensor central volvió al verde césped y no dudó en descargar toda su bronca por lo que le tocó vivir en el último tiempo.
Todavía dentro del campo de juego, Gómez manifestó: “Sinceramente, creo que no estaba al 100% para jugar. Me pidió Marcelo (Bravo) en la semana si estaba listo, le dije que sí, que iba a intentar hasta donde podía desde un lugar en el que me venía entrenando… es verdad lo que se dijo que estuve entrenando en una plaza”.
“Eso también es culpa de la dirigencia de Vélez. Si bien el primer responsable es Foster (Gillet), obviamente, no les costaba nada mandarme un permiso para entrenar a contra turno. Me tuvieron 10 días llorando en una habitación sin poder entrenar”, sumó el hombre de Vélez.
A la hora de continuar con su fuerte descargo, Gómez sorpendió: “Desde ese lado, un poco con bronca también porque nosotros después damos la cara y somos los responsables del mal momento que vivimos, pero las condiciones en las cuales entrenamos no son óptimas, la cancha no está en el mejor estado, el vestuario hay que remodelarlo”.
“Hay que hacer muchas cosas para que Vélez siga siendo lo que es, un gran club. Para que te des una idea, los grandes tuvieron que comprar 32 ventiladores para que podamos dormir la siesta y podamos descansar tranquilos en la concentración. El gimnasio que tenemos no es apto para un equipo de Primera. Estaría bueno que ellos muestren su parte de la responsabilidad”, sentenció el zaguero de Vélez.
Cerca de la medianoche, entrando al día sábado, el futbolista de Vélez tomó su teléfono, abrió Instagram y realizó un posteo en su feed. Este fue el primero del año luego de haber celebrado la Liga Profesional en el mes de diciembre del 2024.
"Acá estoy campeón de vuelta", comenzó junto a tres fotos en las que se lo puede observar con la pelota en sus pies. Además, sumó emojis de corazones con los colores del Fortín.
Posteriormente, Gómez completó: "Gracias a cada uno de los hinchas que una vez más me demostró el gran cariño de siempre. Agradecido con todos ustedes y déjenme decirles que cada vez que me ponga la v azulada voy a ser uno más dentro de la cancha por que amo a este club de la misma manera que lo hacen ustedes".