Aunque en las próximas horas se definirá si el castigo es económico o deportivo (o ambos) lo cierto que la actitud de uno de los referentes del plantel xeneize no pasará desapercibida, por más que se disculpó publicamente y reconoció: "Con la sangre caliente, se me fue la cabeza".
Sergio Romero, de 37 años, viene siendo cuestionado por su desempeño y más de un hincha considera que su ciclo en el club está cumplido o al menos su titularidad es discutible.
La sanción de Boca a Chiquito Romero
En Boca también esperan identificar, y por supuesto sancionar, a los socios que insultaron o lanzaron algún objeto para hacer enojar a Romero, pero esto no afecta la intención de establecer un precedente respecto este tipo de reacciones de los jugadores.
Por eso la idea de los dirigentes es que la sanción contra el arquero sea ejemplificadora.