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Ocurrió en Luján de Cuyo

Condenaron a un hombre que admitió haber abusado a la nieta de su pareja hasta en el baño de una iglesia

Justo Rengifo Quispe (62) fue condenado a 10 años de prisión por los reiterados abusos sexuales que cometió contra la niña cuando tenía entre 7 y 8 años

Sebastián Salas
Por Sebastián Salas [email protected]
Justo Rengifo Quispe (62) fue condenado a 10 años de prisión por los reiterados abusos sexuales.

Justo Rengifo Quispe (62) fue condenado a 10 años de prisión por los reiterados abusos sexuales.

Uno aberrante caso de abuso sexual intrafamiliar que se estaba investigando desde hace casi dos años quedó resuelto por la Justicia. Un hombre de 62 años admitió haber vejado en reiteradas ocasiones a la nieta de su esposa, una niña que entonces tenía entre 7 y 8 años, incluso hasta en el baño de una iglesia ubicada en Luján de Cuyo. En un juicio abreviado, fue condenado a 10 años de prisión.

A mediados de septiembre de 2023 surgió la denuncia que realizó la madre de la víctima. La mujer notó que su hija de 14 años se encontraba dispersa y con dificultades en la escuela. Cuando comenzó a preguntarle fue que la menor de edad confesó los abusos sexuales que había sufrido años atrás.

Según ese primer relato, que luego ratificó y amplió la propia víctima en cámara Gesell, los hechos ocurrieron entre 2015 y 2016 en un domicilio ubicado en el barrio Jardín Agrelo, en Luján de Cuyo, donde vivía Justo Rengifo Quispe (62) junto a su pareja, abuela de la menor de edad.

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El hombre aprovechaba cuando la niña se encontraba visitando a su abuela y esta última se iba del domicilio a hacer compras. En esa instancia es que la abusó sexualmente en reiteradas ocasiones.

Pero ese domicilio no fue el único escenario en que ocurrieron los abusos sexuales. El hombre también la atacó en el baño de una iglesia evangelista de Ugarteche a donde asistía la familia y también cuando la traía de regreso del templo en su camioneta.

La detención y condena por abuso sexual

El sujeto fue detenido a los pocos días de la denuncia. Desde entonces se encuentra privado de su libertad. Y el miércoles pasado decidió terminar con la causa al admitir haber cometido los hechos de abuso sexual y ser condenado en un juicio abreviado.

La Fiscalía de Delitos Sexuales llegó a un acuerdo con la defensa y el juez Sebastián Sarmiento terminó condenado a Justo Rengifo Quispe a una pena de 10 años de prisión por abuso sexual simple, gravemente ultrajante y con acceso carnal, todo agravado por estar encargado de la guarda de la víctima.

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