El creciente interés por las monedas de 10 centavos de 1955 se debe a su contenido de plata, su escasez y su atractivo histórico.
La moneda de 10 centavos por la que pagan 9,500 dólares
La numismática, el estudio y colección de monedas, billetes y medallas, ha capturado la atención de aficionados y coleccionistas en Estados Unidos durante siglos. Este campo no solo ofrece una ventana al pasado, sino que también puede ser una inversión lucrativa.
Algunas monedas, a pesar de ser comunes, ocultan historias fascinantes y un valor significativo en el mercado. Entre estas piezas destaca la moneda de 10 centavos de 1955, que ha alcanzado precios sorprendentes en subastas, convirtiéndose en un verdadero objeto de deseo para coleccionistas y entusiastas.
La moneda de 10 centavos de 1955, parte de la serie Roosevelt, fue diseñada por John R. Sinnock. En el anverso, presenta el rostro del presidente Franklin D. Roosevelt junto a las inscripciones “LIBERTY”, “IN GOD WE TRUST” y el año de acuñación.
Su reverso muestra una antorcha flanqueada por ramas de olivo y roble, simbolizando la libertad y la paz. Esta moneda está compuesta por un 90% de plata y un 10% de cobre, lo que la hace especialmente atractiva para los coleccionistas.
No todas las monedas de 10 centavos de 1955 tienen el mismo valor. Para que un ejemplar alcance la impresionante cifra de 9,500 dólares, debe ser de una categoría específica: la moneda acuñada en la Casa de Moneda de Filadelfia, que carece de las marcas “S” o “D”. De las 12,450,181 piezas producidas, solo unas pocas en condiciones excepcionales alcanzan ese precio elevado.
La rareza y el estado de conservación son determinantes en la valoración de estas monedas. Según el Servicio Profesional de Calificación de Monedas (PCGS), una pieza calificada como MS-68, casi perfecta, puede valer 9,500 dólares, mientras que ejemplares en condiciones inferiores tienen un valor mucho menor. Por ejemplo, una moneda en estado MS-62 puede llegar a valer solo hasta $7.