El Gobierno avanza con el control sobre las empresas de medicina prepagas e intimó a 56 entidades a regularizar su situación, tras haber completado la baja definitiva de otras 58 firmas del sector.
El Gobierno avanza con el control sobre las empresas de medicina prepagas e intimó a 56 entidades a regularizar su situación, tras haber completado la baja definitiva de otras 58 firmas del sector.
El procedimiento que lleva adelante la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS) significa un ultimátum para los agentes de salud que presentan irregularidades, ya que estableció un plazo de quince días de corrido para que los mismos acrediten el cumplimiento de las normativas y/o formulen un descargo.
Desde el organismo advirtieron que “de no ocurrir, se darán de baja y se cancelará su inscripción provisoria”, siguiendo los pasos de otras 58 empresas que, semanas atrás, dejaron de figurar en el Registro Nacional de Entidades de Medicina Prepaga (RNEMP) a raíz de que “tampoco cumplían la normativa vigente al no haber presentado padrón de usuarios, planes de cobertura, cuadros tarifarios, estados contables ni balances generales”.
Al respecto, destacaron que “en estos 9 meses de gestión, la SSSalud recuperó su rol fiscalizador y comenzó a exigirles a las empresas la documentación obligatoria que debían presentar y no lo hacían”, por lo que “así detectó que decenas figuraban inscriptas como Prepagas, pero que en la práctica no lo eran ya que jamás habían presentado ningún tipo de documentación ante el organismo”.
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En este marco, el organismo sostuvo que “el cumplimiento de las normativas es esencial y fundamental para el Gobierno Nacional”, explicando que “esto significa que las entidades que forman parte del sistema deben ser aquellas que cumplan con la ley, compitan entre sí y brinden prestaciones de calidad a sus beneficiarios”.
Continuando en esa línea, precisó que “esta medida tiene como objetivo que los beneficiarios accedan a un mercado más transparente, donde se garantice el acceso a prestaciones de calidad a partir de la libre competencia entre los Agentes del Seguro de Salud y la libertad de elección de los usuarios”.